Ermel Viacheslav Tapia Sosa
Dedico estas horas de trabajo con las palabras, a mis hijos y a mi ilusión perdida margorie
Opinión lectora
Ermel Tapia Sosa es un hombre muy conocido en los círculos
intelectuales y académicos de la provincia de Esmeraldas, pues se trata de un
profesor que imparte sus conocimientos didácticos y pedagógicos en el instituto
Superior Pedagógico “Don Bosco” y en la Facultad de Ciencias y de la Educación
de la “Universidad Técnica Luis Vargas Torres “.
Su larga y eficaz trayectoria docente le ha permitido, además, servir a la Universidad Técnica de Esmeraldas
en el campo administrativo, cuando fue elegido Decano de la Facultad donde labora, época en la que editó y
mantuvo por largo tiempo la revista “EDUCACIÓN
SUPERIOR”, en cuyos diversos números semestrales podemos encontrar ensayos
orientadores, entre otros, de la autoría
de Ermel Tapia Sosa.
Ahora, este proficuo intelectual esmeraldeño nos ha
sorprendido con el cuaderno de poemas titulado “Poesías de amor y de urgencias
revolucionarias”. Sorprendido, digo, porque ignorábamos su inclinación a
penetrar en los territorios de la lírica, donde a decir verdad, se desenvuelve
con soltura, logrando textos poéticos de notables cualidades y calidades.
La experiencia amatoria alimenta y riega, con su caudalosa
incitación, los versos de la primera parte del poemario, en los que se
evidencia la presencia de la naturaleza y el paisaje como telón de fondo de lo
pasional y lo sensual, amalgamados a los
sones de tambores de la cimbreante y
palpitante música vernácula esmeraldeña.
En la segunda parte encontramos los poemas de “urgencia
revolucionaria”, en los que el autor da cuenta de su visión del mundo, y
esgrime su pensamiento, sus ideales y sus preocupaciones por los problemas
sociales de nuestro tiempo, pero, así mismo, su esperanza y sus convicciones en
que los cambios revolucionarios nos conducirán
finalmente a un mundo de paz, de justicia, y de igualdad de
oportunidades para los seres humanos.
En la escritura poética de Ermel Tapia se manifiesta una
clara voluntad comunicativa e
importantes pinceladas de originalidad en la construcción y el desarrollo
temático, por lo que estoy seguro que el poeta que alienta en este educador,
irá, cada vez, afinando su instrumental estilístico para entregar más y mejores
frutos de su evidente sensibilidad, a sus lectores, quienes, a partir de este
notable poemario, estaremos esperando.
Doy, pues, la bienvenida a los predios de la lírica, al
apreciado intelectual y amigo, Ermel Tapia Sosa, con mi aplauso y vaticinio.
Esmeraldas,
enero del 2013
José Sosa Castillo
Comentario a la obra poética
En los poemas de Ermel Tapia Sosa se escucha en un primer
momento una apertura a lo sensual con
musicalidad y ritmo caliente, bien estructurado y en un segundo momento, las
voces de urgencias revolucionarias, muchas veces silenciadas, por ser de
seres oprimidos, dominados, alienados
por los medios mediáticos imperiales, se
pinta un escenario de impunidad y de explotación del que se despiertan, y se
rebelan los seres con conciencia a las matrices mediáticas de las cadenas
mundiales de la domesticación, entonces se
clama en coro y a una sola voz por el cambio, la igualdad, el buen
vivir, en accionar de lucha contra el hambre, la miseria y la opresión.
La lírica recoge los
ideales de pensadores y filósofos del ayer y de hoy, que han sido, y serán paladines intelectuales para salir del
oscurantismo impuesto por los dueños
desde el poder, de la luz y la verdad.
En los versos se
refleja la insatisfacción ante la explotación, el sojuzgamiento de pueblos y
naciones que no se alinean, ni se inclinan a la ideología de los opresores de
siempre que buscan afanosamente crear conflictos en otros lares para sacar
provecho, saciar sus mezquinos y miserables intereses.
La voz de Ermel insurgente, resulta tronante y
revolucionaria es una chispa en ese histórico acumulado de su fructífera vida
entregada al desarrollo de las ideas de la pedagogía, de la lucha por cambiar
estructuras de esquemas mentales de la
juventud esmeraldeña y ecuatoriana que buscan
formarse como docentes, como seres humanos.
Marjorie Quiñónez y
Marco Ríos
Compañeros de la Comisión de Investigación Educativa del Instituto Superior
Pedagógico DON BOSCO
LUNA Y TEMBLOR DE
PIEL
vienes, luna tierna desgarrando la oscuridad,
ondeante, caderante, tras tu velo ralo,
apresurados pasos, desmarañando nubarrones,
marañas de nubes en desbocada carrera,
impiden tu claridad irradiante de ternura,
silueta tímida, refulgente en cristalinas aguas,
sensitiva, tierna, gotas de sudor resbaladizas,
remanso de amor intenso, loco desvarío,
refugio de pasión, irreverente digna,
refulgentes senos, envolvedores de pasión,
locura de besos, tiernos, azucarados, miel,
acoges en tu pecho mi loco desvarío,
patacoré, a ritmo de guasá, maracas,
atarrayas mi cuerpo, eflujo de simiente,
acompasado ritmo, marimba y rumba,
agitado corazón, movimiento de piernas,
caderas en exaltado temblor, pasión sin fin.
EN TU COMPAÑÍA
Calor de piel, enredadera del corazón enamorado,
Ternura, sencillez y calma en la que reposa el alma,
Fluir acelerado, torrentes de sangre bajo tejido de rosas y
claveles,
Mano que recorre la tez de suaves curvas desde la cabeza a
la punta de los pies,
Pezones erizados, capturados por los labios de la boca y del
lívido en pleno vuelo del eros extasiado,
Flor en capullo, calor de la palma de la mano que la deshoja en pétalos.
Agitado respirar, sollozos
que esclavizan al oído en
ensueños más eróticos,
Al desmallar la cabeza en el jadeante pecho taciturno,
Los pétalos de las rosas emanan sus fragancias que las manos
acarician,
El silencio cómplice de clandestino lazo, deja paso al sueño
envuelto en el calor de cuerpos bañados en espuma.
AL REGRESO
Mar que en arrebatado oleaje, mueres en espuma, en plena
playa,
¿dónde estas pueblo? Que cobijó mi alumbramiento, en un día
de mayo,
Dioses: Poseidón y Céfiro, ¿qué hicieron con las referencias
de la niñez de antaño?,
Todopoderosas fuerzas, poco
han dejado del: hueco del santo, las chorreras, el caballito y los saca
calzones,
Pasadizos entre fiordos, olas que empujadas envuelven el
camino, la arena y alistan como trampas resbaladizas lajas,
Atrevido y apresurado el paso de tu compañía, resbala, cae y
la acaricias y la empapas con las
cálidas aguas de tu mar oceánico,
Brazos de mar, acoges en tu seno la seductora piel, las
curvas de mi amada compañía,
Tibieza de tu vientre, pureza de cristalinas aguas,
disfrutas de sus senos, sus contornos, sus amores,
Caimito, pueblo mío, sin casas, sin cantero, sin escuela sin
nativos mayores, sempiterna playita futbolera.
Piedra eterna rompedora de olas, testigo de mis penas y de
ensueños, me atrapas a tu oído para escuchar, la historia, la huída de la gente,
la desaparición de los canteros.
AUSENCIAS
Aire bañado de mar, creador de olas, alegría de surfistas,
Soldado impotente de la depredación de erizales, pepinos de
mar, langostas y burgajos,
Otrora marea roja de cardúmenes, riqueza de pesca, alegría del
vivir viviendo,
Marea baja, aparición de playa, lajales, pedreríos y
caletas,
Baja mar por horas, apertura de senderos, camino apresurado de los caminantes,
Lugar de encuentros de cuerpos, abrazados a la briza, a la
luna o al sol en su cenit, besos con ternura,
Cita de amores, ciudadanos en busca de aventuras, cobijados
bajo el mar o por sus arenales, olor de canela o de limón,
Al asecho el maligno,
posibilidad negada del encuentro, de aromas, de los deseos más intensos,
Frente al miedo, al temor, se paraliza el encuentro de boca
con boca, cuerpo con cuerpo, se mueren las caricias atrevidas.
Marea llena, frustrada, estallar de violencia del mar contra
las rocas, eflujo apurado de espuma, después de los jadeos, y gemidos.
PENSAMIENTO
Cuerpos enrocados, anudados, al trinar del madurero y la
chagüisa sobre la cortina del vitral de la ventana, sobresaltados se
despiertan,
Sobre el lecho, la blancura de la piel, olor fragante a
sexo, canela, frenesí,
Fugaces pensamientos,
calor ardiente, ondulado carmesí de senos hendidos en el pecho, agitado
corazón,
Pensamientos, palabras entrecortadas, apretadas en la lengua
que recorre la piel crispada por el vientre,
Agitado pensamiento, tentación de seguir las curvas
deslizadas entre las piernas, los pezones, los labios, la ondeante cabellera,
Rostro diáfano, ternura, cariño, sonrisa asentidora de los
lamidos en la oreja,
Acontecimientos de manos, brazos que se agarran a la
espalda, al cuello, a la cintura de cuerdas, ritmo y melodía,
Atrapamientos de lenguas en las bocas, sentimientos fugaces
en la espuma, en el lecho, en la cama, arrebato de pasiones en el final del
éxtasis, del amor en pleno vuelo.
TIEMPOS DE GUERRA Y
DE MUERTE
Ternura,
prodigio de la pacha mama, abundancia de amor de la mezcla, indo – afro -
americana,
torrente de vida, hombres que con afán abren sus surcos,
de ellos, sus
simientes, sus frutos, sus cosechas, la canasta
familiar, desarrollo integral, vida feliz.
Trabajo de
amor, colectivo de ciudadanos, pueblo organizado, poder popular,
democracia,
participativa, protagónica, motor del
desarrollo, buen vivir, torrente socialista.
Vientos del
sur de América atrincherados contra la
ambición, la destrucción, la avaricia, la guerra permanente del imperio,
fabricador de armas, dictaduras y de guerras,
Terrorismo capitalista, iracundia mediática, propaganda
negra, para generar despojos, derrumbar
gobiernos, apropiación del petróleo, domesticar conciencias, esclavitudes eternas, ¡viva el libre
mercado! Pregonan a boca llena.
Transnacionales
neoliberales, ejércitos manipuladoras de la ONU y de la Comisión Internacional
de los Derechos Humanos, subyugadores de la independencia de los pueblos, secuestro
de la libertad.
Oligarquía enemiga del pueblo, de lo que el pueblo es,
portadora de miseria, contaminación, explotación, banalización del amor, matrices
mediáticas dirigidas a la prostitución de la vida, a la muerte de la pacha mama.
A VECES
Cuando la soledad y la tristeza van envolviendo la ilusión
de mi vivir, agotando la alegría, la fe en la utopía,
Y la vida pendiera de un hilo, perseguida por los dolores
de: espalda, columna, neuritis y pólipos
resultado congénito, o producto de la contaminación capitalista, lluvia ácida
recogida para saciar la sed frente a su ausencia, gases químicos expulsados al
aire generadores de alergias, interrupción del paso del aire en la nariz,
ahogo, asfixia en los pulmones, en la lectura de una prensa irrespetuosa de
informar bien a los lectores.
En esa crisis depresiva, vienes en mis recuerdos, galopando en
mi inteligencia con tu pasión sempiterna, con tu presencia, tu ternura, tu
alegría, tus palabras tiernas, apacibles.
En el silencio de este aposento que dejaste empezado, te
siento en el crujir de las puertas, los vitrales, en el viento que corriendo
apresurado se penetra por la azotea, y te posas en mi lecho, como siempre
fresca, juvenil, alegre, aprietas mi espalda, calurosa, tu cuerpo, tibio se
deshace, puesto que, no llegas a mi pecho, ni a mi boca, misma que se atraganta
con la tos de este mal, que de apoco apaga la vida, la esperanza.
LA ABUELA Y SUS
FANTASMAS
Apártate de la reunión, los niños no pueden escuchar la
conversación de los mayores, decía la abuela, frente a la impertinencia de los
niños que querían saber lo que decían los adultos.
Ese tono era una ley, una orden, que había que acatar, pero,
desde lejos, aparentando jugar, el oído atento, escuchaba los relatos de la tunda, del dragón
que era el arco iris tomando el agua con atronador sonar de su garganta en la quebrada de un río.
Se decía que de la lengua del dragón quedaban sus restos,
encontrados en los basureros arqueológicos de los antepasados y que unos niños
habían muerto, puesto que habían observado al dragón tomando el agua en la
quebrada.
La abuela conversaba de la serpiente gigante, vista en el
salto del río aguas arriba, estaba al
asecho del cerdo o del conejo, pero que podía ser un niño.
Los relatos escuchados como verdades, constituían un saber latente, cuyo temor se acrecentaba cuando había que
hacer llegar un mensaje a un familiar distante su vivienda a media hora de la
casa, el terror aumentaba al cruzar el sendero por el salto o la quebrada, los
bellos se erizaban y el cabello se ponía de punta al chasquido de hojas que
arrancadas de las ramas de los árboles por el viento, caían revoleteando sobre
la alfombra de hojas muertas devoradas por los musgos y los helechos.
LA
CITA
Luego de caminar por el jardín de bellas rosas, jazmines,
alelíes, y bromelias, te encontré, frente al sol deslumbrante, tierna, dulce,
toda llena de ambrosí, de tú infinito amor.
Nos citamos para conocer el Sur de montañas que repentinamente se arrojan a la
mar desde las alturas, y desde aquella mirada honda nos regala la hermosura de
sus aguas purpuras, cristalinas, profundas de la mar.
En esos parajes, quietos, absortos por su embriagador
reflejo de las movedizas olas que juguetean con los rayos del sol muriendo al
atardecer, tocar tu piel fue mi deseo.
Arriba sobre la montaña, apretados a nuestros pechos quería disfrutar
de tu compañía, acariciados por el viento de la marea que ululeante lo envuelve
todo, lleva el crujir de las olas a las hondonadas, valles y recodos y roba el silencio de la quietud necesaria para
admirar la belleza de tu rostro.
Pero no llegaste a la hora de partir, y con la angustia de
tú ausencia, me deje llevar por el transporte, recordando tu lucidez, tu andar
ligero, aquel vestido que cual cascada se desliza frágil apegado a la forma de
tus curvas y su juego con el viento.
A pesar de tu ausencia, tu rostro me acompaña en los
instantes de alegría, que apegado a los libros, te encuentro en sus metáforas,
en sus pasajes y paisajes, allí apareces tú y te veo en las tantas citas de
esperas, gastadas a la salida del colegio a las que no llegaste.
BANDERAS ROJAS
Es tanto el amor por la patria, que las masas desbordan las
avenidas de: Yaracuy, Barquisimeto, Barinas,
Aragua, Miranda, Bolívar, Maracaibo, Sucre,
Carabobo, Caracas, toda Venezuela, cual gigante, sus pasos firmes son un
mar de gente de pueblo, acompañando a Chávez, a su líder, pueblo consciente de
sus responsabilidades con el futuro de América y del Mundo.
Rojo es el color se su sangre que bulle y se atrinchera para
no volver al pasado, oprobioso, neoliberal, que destroza la vida de los
ciudadanos en Europa.
El amor del pueblo, en ese mar, en esa avalancha roja, es tan grande que defiende su
independencia, su dignidad, del demonio capitalista, que en el pasado los acorraló, y los llevó a
comer perrarina y agua de arroz en vez de leche, porque toda la riqueza
nacional la burguesía la entregó a las transnacionales y al imperialismo.
En sus pechos la multitud lleva la mirada profunda de
futuro, de vida, de educación, de salud, de vivienda digna, de patria feliz, el
pueblo convertido en Chávez en una ola de amor, es el poderío de manos levantando
las banderas rojas de la unidad latinoamericana, es la fuerza levantada para
romper el desastre capitalista y crear una sociedad humana, de democracia real
protagónica, cuyo poder radica en la organización popular, el socialismo.
LOS INDIGNADOS
Al modelo de la justicia, la solidaridad, del vivir bien,
del sermón de la montaña, del amor a la
pacha mama, había que acabarlo.
Al modelo de la vida digna, al sueño del hermano Francisco
de Asis, al humanismo de Martí, del Che, de Bolívar, y de Jesús, se lo declara terrorista.
Los abanderados del capitalismo salvaje: Fukuyama, el imperio
mediático de las transnacionales, el neoliberalismo, proclamaron el fin, la
muerte de las ideologías.
Mundo unipolar, florecimiento de la mano invisible del
capitalismo, crecimiento de las guerras, burbujas inmobiliarias, salvataje de la banca mundial, desprecio al
ciudadano, esclavitud con deudas nunca autorizadas.
Dolor, pobreza, represión, desastre económico capitalista,
disminución salarial, pérdida de conquistas laborales, derrumbe del estado de
bienestar.
Muchedumbres de: España, Portugal, Italia, Francia, EEUU,
Grecia, en las calles, indignados, levantando banderas por un orden multipolar,
por una democracia participativa y protagónica, contra las guerras orquetadas
por los imperios , contra la muerte, por la paz y la justicia social, lucha
invisibilizada, hombres, mujeres garroteados, ¡les secuestraron sus voces!
FE Y AMOR
Eugenio Arellano va: surcando la manigua, el mar bravío, por
el camino del amor, alumbrado por el poder de la Fe social, la del compromiso,
la de la redención de los pobres.
En su verbo, en su palabra, el compromiso es con la justicia
del humilde, con su dignidad, con su seguridad, porque el rico, el capitalista,
la tiene asegurada.
Torrentes de pensamientos fluyen, y cual granizos duros,
acicateadores caen, para el rebaño, quien pudiera estar absorbido por ideas, del
deseo, del individualismo, del poder, del dinero, demonio que todo lo oscurece.
Su palabra, sus metáforas y cuentos del manaba y su machete,
son explicadoras de la trascendencia de la Fe y del grande y poderoso Amor.
La Fe por el amor
mueve montañas, y el hombre de Fe, sosega su corazón, trae tranquilidad a su
razón, porque el consenso de un grupo, no es la razón del Cristo del sermón de
la montaña, porque la verdad del pueblo es la verdad de Dios. Convoca a la fe
con compromiso y advierte que frente a la vida, los aborteros de niños, no son
más que sicarios de la muerte.
La Fe es como el agua
transparente, purificadora del renacer del hombre nuevo, la Fe no es subjetiva,
sino materialización por la vida que no se negocia y que lucha, junto a
millones de manos que se levantan, para exigir: salud pública, seguridad
pública, trabajo digno, vivienda digna, educación de calidad… necesidades del
pueblo que las requiere con urgencia, para ¡vivir viviendo!
YEREMI
Delgadito, negrito, adelante en la silla está, para escuchar
a su maestra la que le dice que su mamá es;
la que le brinda su regazo y amor, pues en su casa es: pobreza, dolor,
sufrimiento que atormenta su corazón.
Incluido en el aula está Yéremi, mirando atónito, medio
embobado a sus compañeros que molestan, que interrumpen, que bullicio hacen,
pero que felices son porque reciben cariño de sus padres, todo amor.
Yéremi incomprendido, se levanta y deambula por el aula con
inocencia, con sonrisa abierta que cubre su rostro sobre la que se descuelga un
ramillete de dientes de púrpuro marfil.
Cuando Yéremi se olvida de su casa y se confunde con sus
compañeritos en el juego, en la alegría y se siente uno más y también molesta,
entonces el grupo, los que saben de su sufrimiento le gritan: rata, rata, rata.
Entonces Yéremi se defiende y les canta: como se ven, como se van los maricas de
timbiré, la maestra en esa mar encendida de ritmo y algarabía interviene,
pone orden y la gramática, y la historia siguen su curso en la incertidumbre,
en el caos de un aprendizaje que se define tardío.
GIGANTE COMANDANTE
Cual torrente de
aguas cristalinas, del Cazanare, Apure y del Arauca que con música
llanera ha cantado, son sus pensamientos, aguas agitadas, se renuevan en lo
nuevo a cada instante,
pedagogo insurgente descifrando a Niesche, a Mézaros, alumno
estudioso del Che, de Bolívar, ¡padre de
la patria!,
tus pensamientos de misiones, de patria buena, patria
bonita, de integración latinoamericana,
surgen como canto tierno, frente a la brutalidad neoliberal,
tus sueños de forjar el socialismo, de redimir al pobre, transcienden
las fronteras de Venezuela, de América,
como huracán recorre el Mundo, porque encarnan amor, lo entiende el
europeo acorralado en ese desastre aterrador
de la muerte del capitalismo salvaje,
en tu ausencia, todo un pueblo en revolución para conquistar
el vivir viviendo, se atrinchera y responde al imperio con unidad y
contundencia revolucionaria,
de cara frente al mal del cáncer, tu amor infinito a Dios,
de cara a la canalla mediática mundial, tu amor y gobernar obedeciendo al pueblo,
de cara a la batalla con la muerte, tu firmeza y fuerza
inmensa en tu mano izquierda, alegría en el rostro, por la victoria, por el
socialismo,
en ese silencio obligado del más estricto tratamiento, en el
silencio conciencial de Chávez por la vida, las fuerzas de su ser en plena
lucha, con el Cristo agarrado entre sus manos, enfrenta al dolor en el vilo de
la muerte, la conexión del amor del pueblo llega, millones de oraciones se
agalopan, no lo dejan doblegar, le impulsan, le levantan,
en ese mundo de dolor, no estás solo comandante, porque, Infinitas
muestras de amor se levantan en el mundo, infinitas voces ruegan por tu retorno
victorioso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario